Cómo transmitir optimismo y aumentar la autoestima

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A mí también me ha pasado que para animar a alguien y elevar su autoestima procedía a soltarle una serie de frases hechas, al estilo de: "Ánimo, tú puedes superarlo", "Tienes que reponerte lo antes posible", "La vida sigue", "Yo también pasé por eso", "Piensa en tus hijos…", etc. Pero sin embargo no parece que surtan mucho efecto, principalmente porque son frases muy escuchadas, refritas, y además, dichas sin emoción. Si te paras por un momento a recordar aquellas ocasiones en que te sentías decaído, desanimado…, y te preguntas ¿Qué es lo que tenían que hacer los demás para animarte? puede que descubras algunas pistas, sobre todo de lo que no te ayudaba.

Dice Françoise Kourilsky en uno de sus libros:

"El reconocimiento del otro, de su valor y de sus recursos, constituye una especie de cordón de acero que une a los individuos en el respeto. El individuo evoluciona tanto más cuanto más respetado y reconocido en su identidad se siente. Sólo el respeto del otro permite su evolución: tener imagen constructiva de sí mismo, aceptarse y sentirse aceptado son los elementos básicos del desarrollo humano. Si queremos conducir un cambio, no podemos fundamentarnos en el menosprecio"

Así pues, ante una persona que está sufriendo, deprimida, decaída, etc., no valen las frases bonitas. Lo que más importa es respetarla y que se sienta respetada para así poder asumir que tiene capacidad para seguir adelante. Luego, podríamos intentar conseguir esa relación que describe el filósofo chino Lao Tse, algo así como:

"El uno engendra el dos y el dos engendra el tres que engendra el uno"

Las relaciones entre el "yo" y el "otro" producen el "nosotros", que es lo que permite evolucionar a cada uno para ser mejores, pero desde la solidaridad del "nosotros". Es como si cogieras dos vasos comunicantes y vertieras en uno de ellos cierta cantidad de líquido, lo que ocurrirá a continuación es que ese líquido será compartido interiormente entre los dos vasos hasta igualar la altura. Pues de igual manera, puedes tú intentar aportarle a esa persona que sufre, hasta conseguir igualar su estado o al menos elevarle su estado de ánimo, optimismo, alegría…, o como desees llamarlo. Poco a poco se va generando una confianza, fruto de esa relación, que facilitará en esa persona la creencia y la fe de que puede superar esa situación, pues sabe que no está sola y se siente respaldada.

Busca siempre un entorno adecuado, si es en plena naturaleza ayuda mucho. Practica siempre la empatía y a medida que te relaciones con esa persona que quieres ayudar, pon el énfasis en escuchar más que hablar, pues tú estás bien y no requieres hablar para desahogarte de tus penas, pero esa persona sí que necesita hablar y ser escuchada, y además a la par sentirse comprendida. Cuando escuches mira a sus ojos, siente y que sienta la emoción cuando la mires. De esta manera se irá estableciendo una perfecta sincronización entre los dos, lo que te conferirá cierta influencia en ella, que aumentará su autoestima y motivación personal. En la conversación céntrate principalmente en:

Mirar a los ojos de esa persona, e intentar acompañar su expresión corporal
Aprovecha sus pausas para comentar algo de lo que haya dicho, pero utilizando algunas de sus palabras.
Cuando la escuches, intentar sentir lo que ella siente, eso te ayudará a comprenderla mejor

Esa persona te escuchará y comprenderá mejor cuanto más escuche el eco de sus palabras en tu voz, cuanto más entrevea su reflejo en tu mirada y cuanto más sienta que compartes sus emociones.

Gracias.
José Ramón García

QuiereteMilVecesMas.com